Desdeño las romanzas de los tenores huecos

y el coro de los grillos que cantan a la luna.

A distinguir me paro las voces de los ecos,

y escucho solamente, entre las voces, una.

(Antonio Machado)

viernes, 19 de junio de 2015

El vacío de tu ausencia

Te he esperado
en las horas de un reloj que no callaba,
parpadeante, siempre despierta,
al abrir mis ojos ¡allí estabas!

Entre la sombra desnuda de unas luces de farolas,
entre los inaudibles ruidos de una noche de invierno,
en el ecuador de la hora más prohibida
mis ojos pedían a mi mente
el sudor de tu cuerpo, pegado a mi lecho.

Y mis manos podían, mientras,
acariciar el vacío de tu ausencia.
Desnudas de amor no te encontraba,
ajeno, parece que la vida no olvida;
y la oscuridad despierta
con la luz de la mañana.

Como una daga recorriendo toda mi alma.
No era yo quien dormía,
no era para mí la calma;
sólo era la esposa,
sólo era quien vigilaba.
El sabor de un sueño,
creyendo,
que a mi lado estabas.

lunes, 15 de junio de 2015

Pasión por Josefina

                                                                                                            (A Miguel Hernández)

Escoltada de amistad,
adornada por la luz de la tarde,
regando de perfume las aceras
la calle era la razón de mis sueños.

Centinela al caer el día,
con el zurrón cargado de hambre
preso de la noche más oscura,
confundida con mechones de tus cabellos.

Apostado cómo un naufrago,
esperando el amainar de sus olas,
cada día y cada noche,
eras la razón para vivirla.

Ordeñando los puntos y las comas,
prendido de ti, ¡amor!
¡Huí a toda prisa!
deslizando en tus manos mis versos,
supe que eras la pasión de mi vida.

Ensangrentado de dolor,
buscando una cura para mis heridas
nunca hallé tanta calma,
al roce de tus manos con las mías.